En esta época de frío tu huerto urbano no tiene por qué desaparecer solo debes tomar en cuenta cuáles son las hortalizas que mejor se llevan con esta época del año.
Coliflor
Para que tus cultivos de coliflor estén listos para su cosecha en verano, siembra esta variedad durante enero y febrero en una caja con tierra cubierta, utiliza hojas, pasto, paja y hasta aserrín para cubrir la tierra y que se protejan las raíces del frío. Coloca tu semilla en una profundidad mínima de 30cm.
Riega una o dos veces al día sin exponer al sol directamente hasta que germine, esto sucederá alrededor del quinto día. 10 días después, tendrá al menos 4 hojas verdes y sabrás que es momento de trasplantarlas, elige aquellos brotes que tengan el tallo morado, las raíces más firmes y las hojas mejor formadas.
Entierra las raíces y el tallo en una maceta o directamente en tu huerto. Es importante que sea un lugar abierto y soleado con buena humedad, pero sin que se encharque ya que esto podría afectar su crecimiento. Una vez que hayas hecho el transplante riega de 3 a 5 veces por semana si no hay lluvias.
Las enfermedades más comunes que pueden aparecer en el cultivo de coliflor son:
- Hernia: son hongos que abultan el tallo y las raíces o que marchitando sus hojas.
- Mariposa: es blanca con puntos negros que pone sus huevos en las hojas. Después sus larvas se comen las hojas.
- Mosca: es un tipo de mosca muy parecida a la mosca común que se sitúa en el cuello del tallo y forma galerías hasta dejar hueco el tallo. Las plantas jóvenes de marchitan y mueren.
Estas enfermedades y plagas son muy difíciles de tratar así que Cada semana revisa tu huerto para poder estar alerta a estas plagas y para eliminar las hierbas que aparezcan también conocidas como maleza, así evitarás otros problemas como que se refugien insectos o que compitan por los nutrientes del suelo.
Rábanos
Los beneficios del rábano en el cultivo son que crecen en espacios pequeños y de forma muy rápida, sin necesidad de trasplante, esto quiere decir que se desarrollan en el mismo lugar en donde se plantan, hasta que llega la hora de su cosecha.
Son una buena opción para plantar en invierno porque la temperatura mínima que necesitan para germinar es de 10ºC. Sin embargo, para que se desarrollen mejor se recomienda que cuando hayan crecido (3 días después de sembrar) se cubran con tierra para que se desarrollen mejor y luego de 15 días se abonen.
Con respecto a los problemas que puedes enfrentarte, las plagas de pulgones y larvas son en las que más debes prestar atención. Revisala dos veces a la semana tu cultivo, sobre todo al reverso de las hojas, ya que en casos extremos puede terminar con todo tu huerto en un par de días.
Para solucionarlo aplica la espuma del jabón biodegradable en donde se encuentre la plaga y retiralos con la mano. También ten cuidado con el crecimiento de maleza para que no afecte el crecimiento de tus rábanos.
Lechuga
La lechuga es uno de los cultivos que más se recomienda a quién empieza con un huerto urbano porque es rápido, tiene menos plagas y es resistente.
A pesar de esto se recomienda que cuando baja la temperatura se coloquen invernaderos para semilleros que pueden hacerse hasta con botellas de pet.
Si vas a sembrar las lechugas desde cero deja remojando las semillas un día entero, luego colócalas a medio centímetro de profundidad presionando ligeramente la tierra. Riega lo suficiente para que se mantenga húmedo todo el tiempo pero no encharcado, puedes colocar una base de arena para favorecer el drenaje del agua.
Las lechugas pueden adaptarse a cualquier clima y espacio pero de preferencia colocalas en un lugar en el que le de la luz del sol directamente por lo menos cuatro horas, pues sus condiciones de temperatura ideal son de 17ºC. Con estas condiciones y un suelo nutrido tardarán en germinar dos semanas.
Luego de esto espera un mes o hasta que midan 10 centímetros de alto para transplantarlas, recuerda que cada una necesita al menos 30cm2 para desarrollarse. Para favorecer el desarrollo de las raíces evita que se creen terrones de tierra, puedes deshacerlos manualmente o con ayuda de un colador.
Las plagas que lo acechan son el pulgón, los caracoles y la mosca blanca, así que revisa constantemente que no haya alguno de estos insectos cerca de tus huertos. También ten precaución con la maleza que pueda surgir, es decir, cualquier otra planta que crezca que no sea lechuga.
Estos cuidados permitirán que en cuatro meses podamos cosechar nuestras lechugas.