“La formación de una capa de un centímetro de suelo puede requerir entre 800 y 3 mil años, pero, en situaciones desprotegidas, todo eso puede desaparecer en un solo aguacero”. FAO
Uno de los temas con mayor resonancia con respecto al medio ambiente es el cambio climático; sin embargo —y sin disminuir su nivel de importancia—, la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) ha hecho un fuerte señalamiento hacia la situación del suelo, pues su degradación podría, incluso, acabar con la vida en el planeta mucho antes que el mismo cambio climático.
Así lo ha asegurado el representante de la FAO en Cuba, Theodor Friedrich, en este, el Año Internacional de los Suelos, pues es necesario “entender las amenazas a que está sometido ese recurso, donde la más grande sigue siendo la labranza mecánica”, puntualizó.
La función más universalmente reconocida del suelo es su apoyo a la producción alimentaria pues, de hecho, se estima que produce el 95% de nuestros alimentos. En este sentido, la mejora de las prácticas agrícolas es necesaria para ayudar a mitigar el cambio climático, toda vez que su desarrollo ha reducido las reservas de carbono en el suelo.
La agroecología, la agricultura de conservación, la agricultura orgánica, la agricultura de labranza cero y la agrosilvicultura son algunos de los enfoques agrícolas que se han promovido para un manejo sostenible de los suelos (suelos saludables) y el aseguramiento de alimentos nutritivos y forraje para nuestros animales: Un suelo vivo y sano es un aliado crucial para la seguridad alimentaria y la nutrición.
Fuentes: Preguntas frecuentes | 2015 International Year of Soils.
FAO Agricultural Engineer, Theodor Friedrich talks about minimum tillage. En www.fao.org