Las tierras de cultivo rinden más si se riegan con apoyo de la infraestructura agrícola que almacena el agua, que si dependen del temporal, por eso los sistemas de riego son clave en el campo mexicano.
México cuenta con 194 millones de hectáreas productivas, de las cuales el 57 por ciento se destina a la producción de alimento para consumo humano o animal, de acuerdo con el Censo Agropecuario 2017 del INEGI. Es decir, casi 6 de cada 10 hectáreas de tierra productiva del país se usa para sembrar.
¿Cómo se hace rendir a esos terrenos de cultivo? El estudio Estadísticas del Agua en México Edición 2016 asegura que esto depende de su sistema de riego: las superficies que son regadas por medio de la infraestructura hidráulica con la que cuenta el país tienen un rendimiento de 2.2 a 3.3 veces mayor que aquellos cultivos que dependen del temporal.
México cuenta con una infraestructura hidráulica que comprende más de 5 mil presas y bordos de almacenamiento de agua, distribuidos en 86 distritos de riego (DR) y 40 mil unidades de riego (UR). A todas estas obras de infraestructura hidráulica que surten de agua al campo mexicano se le conoce como infraestructura hidroagrícola.
Los distritos de riego datan de 1926 e incluyen obras como vasos de almacenamiento, derivaciones directas, plantas de bombeo, pozos, canales y caminos, entre otros. El último construido es de 2012. El agua empleada en estos distritos se aprovecha por gravedad o por bombeo de dos fuentes: una superficial, que puede ser una presa, derivación o bombeo directo de la corriente, o una subterránea que se aprovecha a través del bombeo de pozos.
Las unidades de riego cuentan con la misma infraestructura que los distritos de riego, pero tienen menor superficie y son manejados por productores organizados que se asocian para gestionar y operar dicha infraestructura para la captación, derivación, conducción, regulación, distribución y desalojo de las aguas nacionales destinadas al riego agrícola.
Adicionalmente, en las planicies tropicales y subtropicales del país, en donde existe un exceso de humedad y constantes inundaciones, se crearon los distritos de temporal tecnificado (DTT), en los que se construyeron obras hidráulicas para el desalojo de los excedentes de agua que son manejados por los usuarios organizados.
A nivel mundial, el riego de tierra agrícola demanda el 70 por ciento del agua dulce extraída para consumo humano. De ahí la importancia de garantizar el mejor uso posible de los recursos hídricos, de acuerdo con la FAO.
Referencias
Estadísticas del Agua en México Edición 2016