“Tanta gente con hambre, y tú tirando la comida”, seguramente alguien de tu familia ha dicho esta frase más de una vez. Pero va más allá de unas simples palabras, lo que refleja es una falta de conciencia y de educación en temas ambientales. Actualmente, según datos de la FAO*, a nivel mundial se desperdicia un tercio de los alimentos producidos en el mundo por varios factores, uno muy importante es el del almacenamiento.
El método más común para almacenar cultivos y semillas es en canastas o sacos de tela, que son cerrados con un simple hilo o nudo. Esto hace que el producto quede vulnerable al ataque de plagas bacterianas, micro contaminantes, agua y aire que terminan por generar moho, ocasionando la pérdida parcial o total del contenido. Sin embargo, emprendedores de distintos lugares del mundo (América Latina, Europa, África y el Asia occidental) están desarrollando bolsas herméticas que impiden la entrada de todo lo que afecta la inocuidad y vida útil de los productos.
Las bolsas herméticas son una innovación que a simple vista parecería básica, pero permiten preservar la calidad de las semillas e impiden que estén expuestas al ataque de microorganismos ; además, según un emprendedor de África, con el uso de estas bolsas se evita la pérdida de hasta 50% de las cosechas de legumbres.
Cómo podemos evitar el desperdicio
El director de Banco de Alimentos Quintana Roo, Miguel Gutiérrez, explicó en entrevista que para reducir el desperdicio de comida en nuestro hogar son necesarias dos cosas:
Miguel Gutiérrez señaló, que el tema del desperdicio es un asunto de consciencia y que está relacionado con el nivel adquisitivo de la persona, por ejemplo, una persona que gana el salario mínimo y que debe sostener económicamente a su familia, comprará comida para dos o tres días, y por supuesto todo será aprovechado; en cambio, un joven soltero que recibe un buen salario, es posible que hasta olvide que compró frutas y probablemente querrá comerlas cuando ya estén echadas a perder.
Por último, evitar el desperdicio es un tema que involucra al agricultor, al distribuidor y a nosotros como consumidores; mejorar nuestros hábitos puede ayudar al planeta porque evitamos que más recursos naturales sean utilizados en vano.
*Organizaciones de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO).
Fuentes:
La Redacción Hablemos del Campo
Israel21C. Giant storage bags save crops from mold, pests. En www.israel21c.org
InfoCampo. Almacenamiento de granos: temperatura y humedad, la clave. En www.infocampo.com.ar