¿Te encanta tomar días de campo para conectarte la naturaleza? Pues ya no es necesario salir de la ciudad para estar más de cerca del campo, pues como podrás darte cuenta los huertos urbanos son cada vez más populares, y con ellos las paredes verdes.
Las paredes verdes son en realidad jardines verticales que consisten en tapizar la pared de cualquier edificio con plantas que crecen sin necesidad de un suelo, así como los musgos, orquídeas, bromelias y helechos (a estos se les conoce como plantas aéreas).
Estos jardines forman parte de una nueva corriente en la arquitectura sustentable por sus múltiples beneficios, que van desde lo estético y vanguardista hasta lo amigable con el medioambiente, incluso sirven como un estimulante para quienes están cerca de ellos, pues los ayuda a conectarse un poco con la naturaleza.
Además, estas paredes verdes pueden reducir hasta 8 grados la temperatura exterior, sirven también como filtro del ruido citadino y se pueden regar con aguas tratadas.
Como podrás imaginarte no todo es felicidad cuando de cuidado se trata, pues como en la agricultura –aunque en menor grado- estos jardines también necesitan tratamientos especiales. Primeramente está la correcta colocación y el impermeabilizado de su estructura para que la planta no destruya la pared en busca de alimento y agua. Por otro lado, se debe regar por goteo preferentemente para evitar escurrimientos.
Es muy importante –así como en el campo de cultivo- mantenerlas libres de enfermedades, plagas y mohos, pues al estar tan expuestas a un ambiente contaminado como el de las ciudades, corren más peligro de secarse o morir rápidamente. Estos problemas se tratan con fertilizantes, plaguicidas y fungicidas.
Cómo ves, la agricultura está en todos lados y podemos ser parte de ella.